La COVID19 ya ha pasado factura al entorno profesional. Despidos, recortes de salarios, menos contrataciones, horas extra, reducción del número de clientes… Especialmente para los recién graduados, la búsqueda de trabajo en septiembre 2020 promete ser todavía más complicada que otros años.
Aunque muchas empresas tienen los procesos de contratación congelados. A la vuelta del verano tendrán que reanudarlos para dar progresión laboral a sus profesionistas. Por eso es fundamental que aproveches los meses de verano para prepararte y mejorar tus posibilidades de encontrar trabajo en septiembre. En este artículo te contamos 5 pasos que harán que llegues mejor preparado a las vacantes a la vuelta de verano:
1) Revisa tu CV
El primer paso en la búsqueda de trabajo consiste en tener tu CV impoluto. Esto es, un CV sin errores y actualizado. Con base en este documento la empresa decidirá invitarte a una entrevista o no. Por tanto, el CV debe estar perfecto. Alguna pauta concreta para ayudarte en la revisión:
- ¿Has actualizado el CV con tus últimas novedades? Por ejemplo: calificación final de tu carrera universitaria o maestría, el último curso que realizaste online o las últimas prácticas de verano.
- ¿Tiene una longitud máxima de 1 página? Depende del sector puede estar bien visto más de una página, pero como norma general resume tu experiencia menor a 10 años en 1 página.
- ¿Has pasado el corrector de texto? ¿Estás seguro de que no hay “typos” ni faltas de ortografía? En muchas ocasiones sólo una palabra mal escrita es motivo de descarte.
- ¿Has revisado 100 veces el CV? Apóyate en amigos, familia y conocidos para que realmente esté perfecto.
Este punto es el más importante en tu preparación. Sin un buen CV no serás invitado a una entrevista ni podrás demostrar tu valía. Por ello el primer paso es tener un CV ganador.
2) Define tu estrategia
Antes de empezar a buscar trabajo deberás tener clara tu estrategia de búsqueda. Puede parecerte una obviedad pero no es tan simple como definir tu trabajo ideal, ¿dónde quieres trabajar y por qué? Sino que se trata de establecer los pasos y la preparación para lograr ese trabajo ideal.
Contar con una estrategia de búsqueda te dará orden y te evitará aplicar “a lo loco”. Por ejemplo, antes de aplicar a tu empresa ideal debes tener un discurso perfeccionado para contar tu CV, saber controlar los nervios de la entrevista y haber perfeccionado la habilidad de ser entrevistado.
A continuación marcamos una serie de preguntas a las que tendrás que responder para elaborar esa estrategia:
- ¿En qué empresa(s) te gustaría trabajar?
- ¿Qué contactos tienes en esa(s) empresa(s)?
- ¿Qué otras empresas se parecen o son sus rivales?
- ¿Cuándo es el mejor momento para aplicar?
- ¿Cómo es el proceso de entrevista?
- ¿Cómo puedo preparar el proceso de entrevista?
Según estas respuestas tendrás que definir la estrategia de aplicación.
3) Gana experiencia profesional
La experiencia profesional suele ser un claro diferenciador en los recién graduados. Quien haya tenido más exposición al mundo laboral más posibilidades tendrá de encontrar trabajo. Esto es debido a que ya ha probado su valía en otra empresa.
Por tanto, si no tienes tanta experiencia profesional, o quieres profundizar más en ella y así diferenciarte de tus competidores, te propongo 2 posibilidades para ganar experiencia profesional:
- Realiza prácticas
Ya sea en una empresa que te dé una beca, como supervisor de campamento o de manera gratuita para algún familiar o conocido. Recuerda que buscamos ganar experiencia y por tanto tendrás que des priorizar el sueldo.
2. Ofrece tu ayuda
Muchas ONGs necesitan voluntarios y esto es una gran manera de ganar experiencia profesional. Por ejemplo, si trabajas para un banco de alimentos, en vez de centrarte sólo en “tu trabajo”, ¿porque no propones cómo mejorar el proceso de reparto? ¿eres capaz de hacer un cuadro de mando con los datos del día?
Esto puedes presentárselo a los responsables y ayudarles aún más. Además, te dará la posibilidad de poner en práctica varias habilidades y ganar nuevas.
4) Afina tus habilidades
Las habilidades profesionales pueden agruparse de la siguiente manera: habilidades mínimas, habilidades duras, habilidades blandas y habilidades técnicas. Tendrás que poner foco en aquellas en las que te sientas menos preparado/a:
- Las habilidades mínimas son aquellas con las que todo profesionista debe contar. A nivel genérico, entre las más destacadas son el Word, el Excel y el PowerPoint. Online dispones de numerosos cursos tanto Word, de Excel como de PowerPoint para poder profundizar en estas habilidades.
Debido al uso diario que se les da en las empresas, necesitarás al menos 300 hrs. de exposición en cada herramienta antes de empezar a trabajar. ¿Por qué 300 hrs.? La semana tiene 40hrs, en 2 meses habrás cubierto estas 300hrs de exposición, por lo tanto, si tienes esta experiencia no serás un completo novato. Esto te hará destacar de tus compañeros durante las entrevistas y tus futuros responsables lo agradecerán.
En el caso específico de la consultoría, las habilidades mínimas más relevantes te las detallamos aquí.
- Las habilidades “hard” o duras son los conocimientos necesitados para realizar el trabajo. Según la industria y empresa estos conocimientos serán de diversa naturaleza. Sin embargo, todo este conocimiento se puede adquirir con la autoformación.
Según la industria; lee revistas y publicaciones asociadas, estate al tanto de las últimas noticias del sector, de las empresas más relevantes, qué normativa les aplica, etc. Si eres capaz de leer toda esta documentación tendrás una clara ventaja sobre tus rivales y ese conocimiento será diferencial en la entrevista.
Si no sabes por dónde empezar, prueba a buscar en la página web de tu empresa favorita, suele existir un apartado de “análisis” o “insights”. Este es un buen lugar para empezar a profundizar en la lectura y entender a tu empresa favorita.
- Las habilidades “soft” o blancas son las derivadas de la inteligencia emocional. Estas habilidades ganan cada vez más importancia según te contamos en este otro artículo. Pero ¿cuáles son estas habilidades? Según Udemy, las habilidades más importantes del siglo XXI son:
- Comunicación
- Negociación (recomendamos leer a Chris Voss)
- Hablar en público
- Relaciones interpersonales
- Creatividad
- Pensamiento crítico
- Toma de decisiones
- Resolución de problemas
- Inteligencia emocional
- Por último, las habilidades técnicas son fundamentales hoy en día. Cada vez, se pide más en los curriculums y entrevistas conocimientos en datos, analytics, inteligencia artificial, blockchain, etc. Y todas estas habilidades se apoyan en la programación. Por ejemplo, en Python, R, SQL o VBA. Por este motivo, no podemos dejar de formarnos en estos temas.
Si nunca has programado, si nunca has «escrito código», y los lenguajes de programación arriba mencionados te suenan raro, no te preocupes, a mí al empezar me pasó lo mismo cuando me tocó liberar mallas, en algo llamado Control M… como todo, se aprende con tiempo. Y ahora es más fácil ya que existen infinitos cursos en Coursera, Udemy, edX o cualquier MOOC para cubrir estos conocimientos.
Cuanta mayor sea tu maestría en estos 4 grandes grupos de habilidades, mayores posibilidades tendrás de encontrar trabajo. Por supuesto nadie puede ser experto en todas, deberás seleccionar cuidadosamente cuáles son más relevantes en tu industria y en tu profesión.
5) Prepara las entrevistas
Después de haber decidido en qué quieres formarte para mejorar tus habilidades, el último paso es prepararse de cara a las entrevistas. Para llevar a cabo esta preparación tendrás que:
- Realizar networking con la empresa en cuestión
- Estudiar a fondo a la empresa a la que aplicarás
- Preparar aspectos concretos de la entrevista según el tipo de empresa
- Practicar el CV en video
Antes de aplicar a cualquier empresa tendrás que buscar contactos. Identificar quién es la persona de RR.HH. Si existe algún conocido que pueda contarte cómo es la empresa o ponerte en contacto con alguien que lo haga. Esto te dará mucha información e incluso algún dato privilegiado del proceso de selección.
También tendrás que investigar a fondo la empresa. ¿Por qué quieres trabajar ahí? ¿Qué la hace diferente de sus rivales? Buscamos entender si te gustará trabajar ahí y si tendrás una buena carrera profesional.
Si has conseguido realizar estas dos acciones de manera exitosa tendrás mucha información acerca del proceso de selección: ¿Te harán un caso de consultoría? ¿Será una dinámica de grupo? ¿Un test psicométrico? ¿Una entrevista de competencias?
Según el tipo de entrevista tu preparación será totalmente distinta. Una preparación equivocada hará que tengas muy pocas opciones de avanzar y conseguir ese puesto de trabajo.
Por último, para mejorar tus opciones de ser seleccionado en la entrevista, te recomendamos practicar tu CV repetidas veces antes del día de la entrevista. ¿La mejor manera de hacerlo? Grabándote en video.
Puede parecerte absurdo pero la mejor manera de practicar es mediante el video. Esto te somete a cierto nivel de tensión, como en la entrevista, y además te permitirá verte en movimiento. El objetivo es lograr que veas lo que verán los entrevistadores. Al principio será raro y te dará vergüenza verte en vídeo, pero con la práctica y una vez que te guste tu vídeo, te ayudará a calmar los nervios.
Habiendo hecho muchas entrevistas, se nota quién ha contado repetidas veces el CV y quién está empezando. Es mejor que ese discurso lo perfecciones en casa para tenerlo dominado cuando te pregunten en una entrevista.