Padecimientos como el estrés, fatiga, daños a la vista y dolor ocasionado por mantener una mala postura durante la jornada laboral no solo afecta la salud de los colaboradores, sino que tiene repercusiones negativas en la productividad tanto individual como grupal. Derivado de esta situación las empresas están desarrollando acciones que buscan procurar el bienestar de sus colaboradores.
Al incorporar este tipo de programas no solo se mejora el bienestar de las personas, sino que se impulsa la competitividad de la compañía al promover la calidad de vida de los colaboradores, esto influye en el desarrollo de sus actividades laborales.
Una de las consecuencias de una deficiente calidad de vida es el ausentismo laboral, de acuerdo con un estudio, la productividad de la compañía disminuye en un 13%, a largo plazo esta situación puede ocasionar rotación de personal.
Los programas de wellness están diseñados para promover el bienestar físico, psicológico y social de los profesionales, es importante que identifiques las acciones que lleva a cabo la empresa para mejorar la calidad de vida, así mismo, busca la manera en la que puedes sumarte al programa.
Ahora bien, para que el programa de bienestar obtenga los resultados esperados es necesario que los responsables de Recursos Humanos lleven a cabo un diagnóstico para identificar las necesidades de los colaboradores, de esta manera las acciones de bienestar tendrán una respuesta positiva.
Un punto clave en el éxito del wellness es la participación de todos los miembros de la compañía, por ello, los líderes necesitan motivar a su equipo; generar un compromiso es posible si se establecen metas claras y son comunicadas adecuadamente. Además, es importante desarrollar esquemas de incentivos que despierten el interés de las personas por las iniciativas de bienestar.
Se requiere un compromiso a nivel organizacional para lograr un cambio positivo en la calidad de vida del personal, es importante promover un cambio en hábitos como la alimentación, descanso y actividad física, estos cambios tendrán un impacto positivo en tu productividad y en la de tu equipo.
Por último, el compromiso necesario para generar un cambio efectivo es una cuestión de motivación personal; es importante que los líderes promuevan la autonomía en cuanto al cumplimiento de los objetivos del programa, de esta manera te volverás responsable de gestionar el cambio de hábitos que mejoren tu calidad de vida e impulsen tu crecimiento profesional.