Cuesta creerlo, pero en pleno siglo XXI, mientras más conectados estamos, más difícil nos es desconectarnos de la tecnología y más difícil nos es convivir fuera de la internet con las personas cercanas a nosotros. Entre todo este desgaste, se encuentran aquellas personas que, por diversas causas, se encuentran en la difícil situación de ser adictos al trabajo. Si algún amigo, familiar o conocido tuyo es workaholic, mándale este artículo, porque te hablaremos sobre la adicción al trabajo, sus efectos en las organizaciones y las soluciones que hay para abandonar esta terrible adicción.
Efectos de la adicción al trabajo en las organizaciones
Quizá el primer pensamiento que se puede tener respecto a las consecuencias y efectos que los workaholics causan en sus trabajos es que no hay una opinión negativa. Incluso podría pensarse que las empresas están encantadas con tener empleados workaholics entre sus filas ¡Trabajan gratis! Y no dudamos que hay empresas tóxicas que sí piensan de esa manera; no obstante, la realidad es muy diferente.
Sin embargo, la adicción al trabajo produce afectaciones para las organizaciones que son más perjudiciales que el beneficio obtenido por los workaholics que trabajan sin descanso. De acuerdo con la Revista de Investigación del Departamento de Humanidades y Ciencias Sociales, de la Universidad Nacional de La Matanza, en Argentina; los adictos al trabajo tienden a no delegar sus tareas y evitar el trabajo en equipo, lo que a mediano y largo plazo afecta la productividad del individuo y de los propios equipos. Este modo de actuar de los workaholics es reforzado por una desconfianza a los demás compañeros de equipo, derivada de la búsqueda irrazonable de la perfección, lo que genera ambientes de trabajo tensos y conflictos con colaboradores. Además, cuando las organizaciones desatienden los comportamientos de los trabajadores adictos, estos últimos tienden a volverse ‘imprescindibles’ haciendo que, a la menor ausencia en el área de trabajo, se paralice el funcionamiento habitual de la organización.
Solución para los workaholics
Además de las consecuencias organizacionales de la adicción al trabajo, siempre están los efectos dañinos que producen en la salud y vida de las personas adictas al trabajo; desde la falta de vida social y familiar, hasta problemas de salud, estrés, colitis, ansiedad, entre otros. Por ello, si crees que tú eres workaholic, aquí hay algunas soluciones que puedes implementar poco a poco para desintoxicarte:
- Prioriza y delega. Clasifica las tareas que debes realizar en tu día a día de acuerdo a su importancia y urgencia; esto quiere decir que hay cosas que son importantes y urgentes; cosas que no son importantes, pero son urgentes; cosas que son importantes, pero no son urgentes; y, cosas que no son urgentes, ni tampoco importantes. Además, debes de aprender a confiar en tus compañeros de trabajo y sus capacidades, de tal manera que puedas delegar tareas en ellos. Finalmente, también debes aprender a poner un límite con los pendientes que puedes hacer en un determinado período de tiempo.
- Sé eficiente, pero no busques la perfección. Si algo que estás haciendo cumple con los requisitos necesarios, déjalo así y ocúpate en lo siguiente. Buscar la perfección reduce la eficiencia.
- Cambia tus prioridades. Así como debes priorizar aspectos del trabajo y clasificarlos bajo esa premisa. También es necesario que te pongas a ti como prioridad y dejes en segundo término el trabajo. ¿Qué quiere decir esto? Que te hagas el tiempo para descansar, relajarte y tener tiempo de esparcimiento con tu familia y amigos.
- Desconéctate. Después de tu jornada laboral evita llevarte trabajo a casa o contestar correos electrónicos y mensajes que tengan que ver con el trabajo. Procura aprovechar tu tiempo libre para hacer cosas diferentes al quehacer de tu empleo e incluso viaja y deja atrás el celular y la computadora.
- Si nada más funciona, siempre acude con la ayuda de un profesional en psicología.