Casi como un cliché, hay tres palabras que todo Profesionista en busca de empleo nunca desearía escuchar; especialmente si es para entrar al trabajo de sus sueños: «Nosotros te llamamos». Una suerte de limbo laboral en el que esperas una eternidad y, aunque te hubieras sentido excelente durante la entrevista, la dichosa llamada nunca llega a tu teléfono. Si alguna vez te ha sucedido, a continuación te damos algunos consejos sobre cómo salir de la friendzone laboral.
Cosas que tienes que hacer para no entrar a la friendzone laboral
Cualquiera sabe que la famosa frase «Nosotros te llamamos» es señal de que muy probablemente no te van a dar la chamba, aunque siempre guardamos esa ligera esperanza de que en realidad si sean ellos los que llamen después. El problema con esta frase; y con sus variantes tales como «nos pondremos en contacto» o «te enviaremos un correo»; es que mientras no reciba una comunicación por parte del reclutador de esa empresa a la que quieres entrar, siempre mantienes una ligera esperanza que te atormenta y hasta puedes llegar a rechazar ofertas laborales sólo por esperar esa llamada que nunca llegará.
En realidad, son muy pocos los reclutadores de RR.HH. que se toman la molestia de enviar un correo electrónico o hacer una llamada a los candidatos que no fueron escogidos para el puesto al que aplicaron; por esa misma razón, a continuación te damos unos consejos para salir de la friendzone laboral:
Nunca hagas o digas estas cosas en la entrevista:
Mentir es de las cosas que nunca debes de hacer en una entrevista de trabajo. Hoy en día basta con una simple búsqueda en Google para comprobar las cosas que dices frente al reclutador. Si te cachan en una mentira, muy difícilmente será posible que continúes con tu proceso de aplicación.
Vestir inadecuadamente es signo de poco profesionalismo. Tristemente nos gusta juzgar a un libro por su portada y, aunque varía de reclutador en reclutador, la forma en que vistes es la primera impresión que el reclutador tiene de ti al verte. Tampoco es que tengas que vestirte de smoking; el truco está en aparentar sobriedad y profesionalismo.
No ir preparado es uno de los peores errores. Desde llegar tarde a la entrevista porque no previste el tráfico; no traer una copia de tu CV a la mano; no haber investigado acerca de la empresa para la que quieres trabajar; hasta no traer un bolígrafo contigo puede ser razón suficiente para no continuar con tu proceso de aplicación.
¿Qué hacer si ya estás en la friendzone?
Supongamos que en la entrevista te fue de lo mejor. Saliste de ahí creyendo que te darían el puesto y ya han pasado varios días y no se han puesto en contacto contigo, ¿qué puedes hacer? La respuesta es sencilla: sigue aplicando a otros empleos. No te quedes estancado con la esperanza de que un día te van a hablar, porque puede que te quedes esperando para siempre.
¿Y qué pasa si te ofrecen un puesto en otra empresa pero sigues en la friendzone de otra? Bueno, aquí es un tanto más complicado, pero lo más aconsejable que hagas es hablar por teléfono con tu reclutador y ser muy honesto al respecto de que ya tienes otra oferta. Esto no sólo resulta en una cortesía profesional, pues el objetivo es invitar a la empresa por la que quieres ser contratado a realizar una contraoferta. Si en un par de días no recibes una contraoferta, quiere decir que no están interesados en ti.