En México, 10 carreras concentran el 40% de la matricula total de universitarios. De las cuales, las más populares son: Administración, Derecho, Comunicación, Contabilidad y Psicología. En este sentido, los jóvenes continúan favoreciendo carreras y planes de desarrollo profesional bastante tradicionales que – se supone- preparan a los universitarios para entrar al mundo corporativo, como un despacho, empresa, agencia de publicidad o consultoría y hacer carrera ahí. Una de las razones por las que estas carreras siguen siendo tan populares es que los jóvenes no están conscientes de las distintas oportunidades y caminos de crecimiento profesional que pueden seguir al salir de la universidad. Esto a su vez provoca una mala distribución del capital humano y del talento profesionista en el país que puede provocar que una mente creativa y con potencial innovador continúe bajo el camino de crecimiento corporativo tradicional, únicamente porque no se dio cuenta que podía explorar distintas opciones que a su vez resultan más valiosas para el crecimiento y desarrollo tecnológico y económico del país.
Este es el argumento que desarrolla Andrew Yang en su libro Smart People Should Build Things. Andrew Yang es el fundador de Venture For America, una empresa que canaliza talento de jóvenes graduados a compañías o startups que apenas se están creando y consolidando, especialmente en ciudades poco tradicionales como Detroit, Nueva Orleans o Durham. Por medio de la distribución acertada de talento, Venture for America promueve la creación exitosa de más startups y otorga conocimientos y experiencias de emprendimiento a los jóvenes.
La primera parte del libro Yang narra su propia historia desde que era estudiante de Derecho y cómo al terminar la escuela, el único camino profesional – aparentemente- lo llevó a entrar a un despacho de abogados y comenzar a hacer carrera ahí. Sin embargo, la vida corporativa tradicional no era lo que quería y decidió incursionar en el mundo de programación, iniciar proyectos de emprendimiento – con varios fracasos en el camino- hasta llegar a ser parte de Manhattan GMAT, una empresa que prepara jóvenes para aplicar a posgrados en universidades. Cuando Manhattan GMAT fue comprado por Kaplan, Yang fundó Venture For America.
Sin duda la experiencia de Yang es interesante y cuenta con lecciones valiosas, especialmente desde el punto de vista de emprendimiento. No obstante, una de las secciones más interesantes del libro es cuando desarrolla la importancia del trabajo en equipo y como gran parte del éxito de startups y compañías innovadoras depende de la capacidad de formar equipos que funcionen, se complementen y tengan el interés de hacer crecer una idea, a pesar de los riesgos que esto implica. El autor presenta este tema con una pregunta muy interesante pero que pocos se han hecho: ¿Quién fue el octavo empleado de Google, cuando iniciaba en 1999? La pregunta viene al caso ya que cuando pensamos en compañías como Google, Amazon o Apple, las asociamos, únicamente con sus fundadores Larry Page, Jeff Bezos, Steve Jobs. Cuando en realidad, detrás de estas historias hay todo un equipo de gente talentosa y motivada que ha trabajado durante años para que esto ocurra y cuyas vidas han sido transformadas como resultado.
Es decir, la gente que siguió y construyó estas compañías con los fundadores hizo una apuesta que al final resultó ganadora. Estas personas son admirables y demuestran cómo el plan no debe de ser únicamente, » iniciar una empresa.”, el plan debe ser » unirse a un equipo”. Además, las startups o compañías nuevas no sólo necesitan programadores o ingenieros. Casi cualquier compañía de crecimiento va a necesitar de vendedores inteligentes, líderes o directores de proyectos, y gente que se encargue del desarrollo de negocios, marketing, operaciones, servicio al cliente, creación de contenidos, comunicación, etc. Sin duda, unirte a un equipo o a una “apuesta” de emprendimiento no es sencillo pues está llena de desafíos e incertidumbres. Sin embargo, las enseñanzas que te deja crear algo desde cero te hará un profesionista mucho más capacitado para enfrentar el mundo laboral actual.