Si estás en el área de marketing, diseño o comunicación de alguna empresa, entonces seguramente estás familiarizado con el proceso de Desing Thinking. Sin embargo, este proceso cada día es más utilizado por cualquier área ejecutiva para resolver problemas de una forma mejor y más creativa; si no nos crees, entonces sigue leyendo que ahora te vamos a contar sobre el Design Thinking.
¿Qué es el Design Thinking?
Como su nombre lo indica, el «pensamiento de diseño» es una forma de resolver problemas que evoca a la actividad que realizan los diseñadores en el desempeño de su creatividad. Sin embargo, ésta metodología enfocada como un modelo para la resolución de problemas en todas las áreas de una organización surgió en 2008 cuando Tim Brown, profesor de la Universidad de Stanford, utilizó por primera vez la referencia en una publicación de Harvard Bussiness Review.
Con el paso de los años, la metodología Design Thinking ha ido concretándose cada vez más, al grado de que el propio Tim Brown ha creado multitudes de charlas y contenidos al respecto, como la siguiente charla TED en la que él participó:
https://www.youtube.com/watch?v=J0ZbVAQ8bWI&feature=youtu.be&fbclid=IwAR1qb7iDhkBL57rWD7wPcMpLqFIqDOO2p6WBf7m_nAqYXxbniX2_EZO_K7E
Aplicando la metodología Design Thinking
A pesar de lo que pudieras pensar, el design thinking no es una concepción abstracta sobre la solución de problemas; por el contrario tiene una completa metodología que puedes empezar a aplicar después de leer este artículo:
1) Empatizar con el usuario
El design thinking propone que la mejor forma de resolver alguna situación que involucra algún producto o servicio de un negocio es empatizar con el usuario que experimenta con ese mismo elemento; en otras palabras, es entender lo que viven los clientes en su propio entorno para comprender mejor sus deseos, necesidades y problemas.
2) Definir el problema
Una vez que se ha experimentado que es lo que vive y siente el cliente con los productos o servicios puestos a prueba con el design thinking; entonces es tiempo de identificar áreas de oportunidad significativas en la cuáles se debe de buscar la solución innovadora.
3) Idear las posibles soluciones
Posteriormente, el equipo de trabajo del design thinking requiere de que esté compuesto por múltiples perfiles de manera que las ideas que sean aportadas a la solución conformen soluciones interdisciplinarias y multidisciplinarias. Una tormenta de ideas puede ser la herramienta ideal para ésta fase.
4) Prototipos de soluciones
¿Recuerdas lo que mencionamos al principio sobre pensar como un diseñador? Pues en la etapa de prototipado es justamente eso: traer la solución del papel a algo tangible, con un toque de creatividad. No importa si es para un producto o un servicio; el chiste es crear un prototipo a través de impresiones 3D, una app, algún tipo de software; o incluso algo más de la vieja escuela, como una maqueta o plastilina.
5) Evaluar el prototipo
En esta última etapa es necesario poner a prueba el prototipo de solución creado ante el usuario, de forma que la retroalimentación pueda ayudar a perfeccionar dicho prototipo. Si el usuario no resulta satisfecho con el prototipo de solución, entonces deberemos de regresar algunos pasos atrás, incluso en la identificación del propio problema, para que al final logremos dar en el clavo de lo que queremos resolver.
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