Un tema complejo que siempre causa controversia, ya sea por los tabúes que todavía existen al respecto, que se traducen en discriminación; amén de que conocemos a alguien que ya pasó por ésta situación; e incluso porque tú podrías encontrarte en una situación así y por eso estás leyendo este artículo, lo cierto es que no deberían de despedirte por estar embarazada, pero las artimañas de las que se juegan los patrones y departamentos de RR.HH. se aprovechan de situaciones legaloides que a continuación vamos a analizar, porque responderemos a todas las dudas al respecto del despido por embarazo.
El despido durante el embarazo es discriminación
Detrás de las razones por las cuáles se llega a despedir a una mujer embarazada no hay más que discriminación originada por intereses económicos del patrón o empresario, ayudados por las malas prácticas de los departamentos jurídicos y de recursos humanos que buscan aprovecharse de la condición vulnerable de la mujer y de la incapacidad para sostener litigios largos. Lo cierto es que, existen muchas leyes y convenios internacionales que protegen el trabajo de la mujer, especialmente durante el embarazo y que EL DESPIDO DURANTE EL EMBARAZO ES UNA FORMA DE DISCRIMINACIÓN.
Derechos de la mujer embarazada
Partiendo del supuesto bajo el cuál las mujeres embarazadas son más propensas a sufrir discriminación, especialmente en el ámbito laboral, los derechos que tiene la mujer embarazada, especialmente en el ámbito laboral, son estos:
- La Convención sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Contra la Mujer (también conocida como CEDAW), prohíbe el despido por motivos de embarazo o por licencia de maternidad (artículo 11).
- La Ley General de Acceso a las Mujeres a una Vida Libre de Violencia define como violencia laboral a cualquier acto de discriminación por condición de género (artículo 11).
- El artículo 133, fracción XV, de la Ley Federal del Trabajo prohíbe a los patrones despedir a una trabajadora embarazada o coaccionarla para que renuncie.
- Durante el período de gestación o lactancia, sin perjuicio en el salario, la mujer no podrá trabajar en condiciones insalubres, peligrosas, en el turno nocturno, después de las diez de la noche, ni en horas extra. (artículo 166, Ley Federal del Trabajo).
- No hacer trabajos pesados. (artículo 170, fracción I, LFT).
- Licencia por maternidad de seis semanas antes del parto y seis semanas después del parto (12 semanas en total) con el 100% del sueldo. (artículo 170, fracción II, LFT).
- Licencia de maternidad de seis semanas después de recibir al infante en caso de adopción. (artículo 170, fracción IIbis, LFT).
- Durante la lactancia, derecho a dos descansos extraordinarios de media hora cada uno o reducir en una hora la jornada laboral. (artículo 170, fracción V, LFT).
- Derecho a regresar al mismo trabajo que desempeñaban después de la licencia de maternidad. (artículo 170, fracción VI, LFT).
- A que la licencia de maternidad se tome en cuenta como antigüedad. (artículo 170, fracción VII, LFT).
El pago del 100% del salario
Como se mencionó anteriormente, la licencia por maternidad quiere decir que, aunque la trabajadora no se presente a trabajar, se le pagará el 100% de su sueldo. Para los casos de mujeres trabajadoras que cotizan al Seguro Social, es el IMSS quien cubre este gasto a través de un subsidio, pero sólo bajo la condición de haber reunido 30 cotizaciones semanales durante un año antes de que se inicié la licencia. En caso de no reunir este requisito, será el patrón quien tendrá que pagar el 100% del salario.
Formas en que se ‘despide’ a una trabajadora embarazada
A pesar de todo lo anterior y de todas las disposiciones que protegen los derechos de una mujer embarazada, los patrones y las empresas tienen formas aparentemente legales de cubrir el despido por motivos de embarazo:
Sólo era prestación de servicios (honorarios)
La prestación de servicios, legalmente, no constituye una forma de trabajo y se rige bajo las leyes civiles. Sin embargo, lo cierto es que, si existía horario, vacaciones, descansos, aguinaldo y otras formas de prestaciones y derechos laborales de ley, es claro que la relación era de trabajo y no de honorarios.
Faltó más de tres veces en un mes
Durante la gestación es posible que se soliciten permisos para ausentarse en razón de acudir al médico para exámenes necesarios o presentar complicaciones en el embarazo, y aún cuando se presenten los debidos justificantes médicos, es posible que el patrón se niegue a aceptarlos como tal y por ello decir que es motivo para rescindir la relación laboral.
Ella renunció (presionar para que renuncie)
Otra forma de hacer ‘legal’ la discriminación laboral por motivo de embarazo es presionar a la trabajadora para que renuncie. Cambiarla súbitamente de área de trabajo, asignarle más trabajo que a los demás, en pocas palabras, hacerle la vida de cuadritos para que no tenga de otra más que renunciar. Sin embargo, en medio de un embarazo hay que tener mucho cuidado con la renuncia, pues además de que hay que seguir todas las formalidades que implica, como ya te habíamos comentado en éste artículo; son necesarios elementos adicionales para que la renuncia sea creíble, es decir, si resulta creíble que, por propia voluntad, una mujer renuncie a su trabajo, a su salario y a los derechos de seguridad social que le corresponden.
En cualquier caso, siempre es posible entablar una demanda a través de Conciliación y Arbitraje o los tribunales laborales, por lo que los patrones pueden verse en serios problemas si llega a acreditarse los despidos injustificados por motivo de embarazo.