No es ningún secreto que los salarios en nuestro país son como las cebollas, porque nada más cae la quincena y te pones a llorar porque no alcanza para nada. Tan sólo hace falta mirar al salario mínimo y pensar qué puedes comprar con poco más de $100 pesos al día. Sin embargo, ¿cuánto crees que podría ganar alguien como vendedor de abarrotes? ¿cuánto crees que podría ganar alguien como mecánico? Los datos que te vamos a ofrecer te sorprenderán (o te van a deprimir, también), te presentamos: la desigualdad salarial entre México y el mundo.
Vámonos a vivir a Canadá
Siempre escuchamos de personas que migran para encontrar mejores condiciones de vida. Lo vemos con nuestros paisanos en los Estados Unidos (que mantienen gran parte de la economía de nuestro país a través de las remesas) y, más recientemente con los migrantes centroamericanos que cruzan nuestro país con la expectativa de llegar a la Unión Americana. Pero, ¿tú te aventarías a irte a vivir a otro país? Justo en Canadá están buscando vendedores de abarrotes para ganar lo equivalente a 28 mil pesos mexicanos (cuando un vendedor de abarrotes en México podría ganar en promedio $6,000 pesos mensuales) y en el Portal del Empleo de la STPS, es posible encontrar desde soldador o ensamblador hasta diseñador gráfico web, informática industrial y mecánico industrial, con un sueldo que oscila entre los 48 mil pesos hasta los 69 mil pesos mensuales.
Quizá esto pueda parecerte una completa injusticia y que convendría más irse a vivir a países como Canadá aunque sea para trabajar en un empleo poco calificado pero con una gran paga; sin embargo, también es necesario tomar en cuenta el poder adquisitivo del salario en relación con el país y, especialmente, la productividad.
¿Cuál es el poder del salario?
Para analizar el fenómeno de cuánto en realidad vale nuestro salario tenemos que revisar, en primer lugar, el término de salario real, que es aquel que representa la cantidad de bienes que el trabajador podrá adquirir con el volumen de dinero que percibe y por tanto representa el poder adquisitivo, su poder de compra, la cantidad de bienes y servicios que podrá lograr a partir de su salario. De acuerdo con datos de la Organización Mundial del Trabajo, en su Informe Mundial sobre Salarios 2016/2017, de los países en Desarrollo de la OCDE, México es el que tiene el menor nivel de poder adquisitivo y también el que menos ha crecido, de hecho, sólo en nuestro país el salario real descendió.
La relación con la productividad
Una de las paradojas más grandes que existe en nuestro país es por qué si somos uno de los países de la OCDE en donde más se trabaja, nuestros sueldos son tan pequeños. La respuesta se encuentra en la productividad, entendida como la producción de un producto o servicio por unidad de tiempo. Datos de la OCDE permiten determinar que la productividad laboral por hora es de 18.74 dólares del PIB por hora trabajada para un mexicano; en cambio, el promedio de la OCDE es de 46.98 dólares del PIB por hora trabajada y en países como Irlanda tiene un promedio 85.96 dólares del PIB por hora trabajada; Noruega tiene 80.40 dólares; Luxemburgo tiene 80.37 dólares; Dinamarca, tiene 64.08 dólares y, Holanda, tiene 62.26 dólares del PIB por hora trabajada.
En poca palabras, gran parte de nuestra oportunidad de ganar mejores salarios se diluye por la alcantarilla cuando nos distraemos comiendo nuestra torta de tamal en la oficina o revisando Facebook. El aumento al salario mínimo sin un aumento en la productividad y un cambio en la cultura laboral mexicana sólo podría ser contraproducente para las empresas y la generación de empleos.